La Sala I de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional confirmó el procesamiento de un hombre que había sido denunciado por su pareja por lesiones ante la Oficina de Violencia Doméstica.

Una vez citada por el juez, la víctima intentó desistir de la acción que había iniciado. Como el delito denunciado requiere que la damnificada exprese su voluntad de iniciar la intervención penal, la defensa del imputado pidió la nulidad de lo actuado.

Tanto el juez de primera instancia como la Cámara confirmaron el procesamiento al señalar que la manifestación de la víctima hecha ante la Oficina de Violencia Doméstica era suficiente para cumplir con el requisito de instar la acción penal.

Según explicaron los jueces, “estas actuaciones tienen su inicio con la denuncia que formuló la damnificada ante la Oficina de Violencia Doméstica donde, tras relatar detalladamente el hecho sucedido, fue concretamente interrogada acerca de su deseo de instar la acción penal, respondiendo en forma afirmativa”.